Voy a sembrarte semillas de menta, en cada cuarto que tu cuerpo tenga, en el armario de tu boca abierta y en el pequeño clóset que hay entre tus piernas.
Voy a sembrar en ti semillas de menta, tu piel sera la tierra en que me llueva, poro a poro caera saliva nueva, las nubes de mis labios son tormenta.
Y el sol hara germinar de tu piel vellos de menta.
Y yo recorreré praderas de espalda mentolada, primavera, y en el invierno cuidaré mi cosecha la taparé con cobijas de franela.
Y el sol hara germinar de tu piel vellos de menta. Y el sol nos arrullara mientras dormimos esta siesta.